Solía soñar con él y no dejaba de querer hacerlo.
Pasaban días en que lo único que quería era dormir y volver a encontrarme con él...ese chico,como de mi edad o algo mayor, de pelo alborotado, entre rubio y rojo, de ojos verdes y labios carnosos y rosados. Podía ser el chico ideal, pero había un problema, un evidente problema. No era real.
Vivía enamorada de este adonis imaginario, contaba las horas para volver a caer en sus brazos entre sueños, no dejaba de pensar en el, y no dejaba de desear que fuera real.
En los sueños, nos habíamos encontrado por primera vez al tropezar con el en la vuelta de una esquina, cuando caí al suelo y el amablemente me levanto y pidió disculpas. Eso fue todo la primera vez.
Mas adelante, los encuentros fueron de una naturaleza similar, y era solo por accidente que podía llegar a tomar su mano o que nuestras miradas se encontraran inténsamente por unos instantes.
Una noche, en sueños, me encontré corriendo por una calle, al atardecer, y tropecé nuevamente con él. Ese mismo día, me había propuesto no soñar mas con el chico, ya que afectaba demasiado mi vida en la realidad, y en el sueño, cuando intentó levantarme, agache la mirada, me levante sola, y seguí corriendo.
De un tiempo a esta parte el chico no apareció mas en mis sueños, y aunque sentía algo de nostalgia de volverlo a ver, la vida debía continuar.
Pero hoy, ocurrió lo mas loco, bizarro e irreal que me podría haber pasado en la vida.
Al finalizar las clases en la universidad a eso de las 5, debía ir al doctor, pero se me hacia tarde y cuando baje del bus corrí por la calle sin prestar atención a nada mas que el camino que debía recorrer. Fue entonces, en un pequeño descuido al mirar el reloj en mi muñeca, que tropecé con él....el chico de mis sueños!!, tan guapo y tierno como se veía en mis sueños, no lo podía creer. Fue tal el impacto de este accidental encuentro, que en segundo en que lo vi, perdí el equilibrio y caí de sentón al suelo.
Estaba atónita. Podía adivinar que la cara que tenia de impresión o espato era demasiado graciosa, ya que el chico, tendiéndome una mano no paraba de reír. Entonces cuando vi su mano frente a mi reaccione. ¿Era esto otro de esos sueños?...no,no podía ser. Si bien recuerdo esta mañana me levante, se me perdió un zapato, no alcance a desayunar, reprobe un examen, solo comí una manzana y se me cayeron los apuntes al suelo cuando caminaba en dirección a la parada de buses. No me había acostado aun a dormir...¿o sera que después de no desayunar me desmaye y soné todo lo demás?.
Pellizqué mi mano derecha y me encontré con que todo eso había sido real...y el tenerlo frente a mi en ese momento también. Tome mis cosas y me levante, sin tomar su mano.
-Esto no puede ser real -exclame. El chico me miro un poco sorprendido, yo di un paso atrás y sentí un dolor en la pierna. Entonces, por alguna extraña razón, bebido al dolor recordé la cita con el doctor.
Me arregle un poco el suéter y el cabello y seguí mi camino, sin mirar atrás y sin saber si había una posibilidad, por diminuta que fuera, de que todo lo que paso fuese real.
El resto del día se me fue en un abrir y cerrar de ojos. Otra vez no lo podía sacar de mi cabeza...bueno, aun no puedo, y tengo algo de miedo, porque ya es hora de dormir...debe ser muy tard...hey! ¿y mi reloj?...¿Donde podrá estar?...demonios!,andaré mas perdida que de costumbre...
Bueno, creo que no puede estar muy lejos, solo espero encontrarlo, es un regalo muy presiado de mi abuela.
Creo que ha sido demasiado por hoy, ¡a dormir! buenas noches. Espero volverlo a ver...
