martes, 23 de octubre de 2012

Depresión.

Estaba en busca de algo, pero no podía recordar el qué. Me encontraba a la orilla de una calle en medio de la oscuridad preguntándome que demonios hacía ahí. No veía personas, no veía luces, no escuchaba nada, y no sabia si era porque no existía el ruido o si había ensordecido.
No tenía idea de en donde estaba parada, y sentía que había perdido todos mis sentidos.
Estaba como en la nada, como en medio de un desierto.  Tenía la sensación de que algo debía encontrar, pero no sabía que.
Comencé a caminar esperando ver algo que me ayudara a recordar en donde estaba, que buscaba y como era que había llegado hasta ese lugar. Sin embargo, nada pude encontrar.
Era sumamente extraño, mire al cielo buscando guía, pero me di cuenta de que no habían ni luna ni estrellas. El cielo daba la sensación de ser una espesa mancha de pintura negra, y me preguntaba como, siendo que no habían luces ni luz de luna, podía seguir viendo el camino, esa calle que parecía eterna, sin mayor dificultad.
Empezaba a sentir miedo...no creía estar en ningún lugar antes visto, y a pesar de que no escuchaba ni veía a nadie, tenia la sensación de que alguien me observaba.
Sentí un pánico enorme...mas grande que el cielo mismo, me sentía sobrepasada por esa extraña situación.
Mis ojos se cerraban del miedo, no pude hacer mas que recogerme a mi misma en el suelo y abrazar mis propias piernas. Sentía un nudo en mi garganta, una gran presión en el pecho y muchas ganas de llorar.