Estaba cansada y me dolía
esa parte que solo tu debes saber porque me duele…me estaba
quitando la ropa lenta y cuidadosamente, esa tarde me había quemado
el dedo y las fibras de mi camiseta raspaban la quemadura.
Me sacaba la ropa porque
quería bañarme, pero al quedar desnuda sentí eso que muy pocas
veces puedo sentir. Abrace mi propio cuerpo y cerré los ojos, inhale
con fuerza y por mi nariz entro ese aroma como de amor.
Esa mezcla extraña que
resulta de nosotros dos después de una tarde entera entre tus
sabanas.
Entonces, mi mente
comenzó a divagar. Cada instante había quedado perfectamente
grabado en mi memoria. Me encontraba encantada recordando la suavidad
y precisión de tus besos, pero un gran escalofrío recorrió mi
espalda y recordé que estaba desnuda en medio del baño. Abrí la
llave de la tina y deje que todo lo que había en mi cabeza se fuera
con el agua caliente…
Una vez mas cerré mis
ojos y te vi en mi mente…es difícil explicar todo lo que me
gustaría explicarte, no hay manera… así que solo diré que te
amo.